La terapia de Ondas de Choque es una nueva solución no invasiva para el dolor musculoesquelético con la que cuenta el centro Oxigeno. La terapia de Ondas de Choque extracorpóreas se utiliza con frecuencia en fisioterapia, traumatología y medicina deportiva. Las aplicaciones se asocian principalmente con el tratamiento de los trastornos crónicos musculares y de tendones.

¿Cómo funciona?

La aplicación de ondas de choque conduce a un aumento significativamente de la expresión de los indicadores de crecimiento, lo cual se traduce en la regeneración de los tejidos dañados, sobre todo los de carácter crónico. Vasos sanguíneos recién formados mejoran el suministro de sangre y la oxigenación que conduce a una curación más rápida. Otros efectos incluyen la estimulación de la producción de colágeno, disolución de fibroblastos calcificados y dispersión de las sustancias mediadores del dolor.

¿En qué casos se utiliza?

La mayoría de las indicaciones comunes incluyen: hombro doloroso, epicondilitis, dolor en el tendón de Aquiles, tendinopatia rotuliana, fascitis plantar y puntos gatillos, entre otras.